top of page

Retazos de mi alma

 1. Adolescencia

Todas la cosas que nacen

Son alegres, son bonitas,

Son igual que un capullo

Que a la vida pide cita.

 

Todas las cosas que mueren

Son penosas, son bonitas,

Son igual que una rosa

Que llorando se marchita.

Es emocionante vivir.

Por la gente, las conversaciones interesantes

Por los libros que nos cautivan,

Por las diversiones,

Por los días ociosos, las vacaciones…

Por estas pequeñas cosas

Que encierran otras más grandes.

Por un día de primavera

Contemplando alguna fuente

Mirando el agua caer.

Por un minuto pasado

Llorando de tanto reír.

Por haberte conocido

Y ahora poderte escribir.

Por sentir lo que yo siento

Y querer saber tu sentir.

Porque hay un terreno fértil

En nuestro espíritu juvenil.

Porque aún nos cuesta mentir.

Por todo esto, dime

¿no es bonito vivir?

¡La vida es tan compleja!

¡El tiempo pasa tan pronto!

Casi no puedo explicar

Mi  situación verdadera

Pues cuando llego a abordarla

Ya no es la misma que era.

¡Me cuesta entenderme!

La realidad me supera.

Creo que yo misma me lío

Pues, queriéndome conocer

Me enredo en una, dos

o tres personas a la vez.

Pero ¿cuál de ellas es

La que soy o debo ser?

Mi mente se queda en blanco, agotada,

Esperando la respuesta

Pero ésta se retrasa  o no llega…

Y yo sigo preguntando:

¿Quién soy?

¿Estaré en el mundo para algo?

¿O sólo para contemplarlo?

¿Tendré mi destino programado?

¿O mis pasos dependen del azar?

Escribo mis pensamientos, con rienda suelta,

Deslizándome en la aventura.

Pero, pueden ser inventados, absurdos, exagerados…

Si la vida es sabiduría

Yo le pregunto a la vida

Y si ella no me responde

¿Quién me responderá?

Otra vez vuelve a su cita

Feliz y con buen humor

Esa estación que adoramos:

El tiempo del amor.

Tengo un rincón en mi alma

Donde guardo todos los sueños

Y ahora,

Con la magia que envuelve la primavera

Lo visito continuamente, convencida

De que el mundo podría ser más bello

Si todos nos empeñáramos en intentarlo.

Soy  feliz persiguiendo la hermosura,

Que, de repente, aparece inocente y desnuda.

Camino  tras una corriente de sensibilidad,

De puntillas, despacio, flotando…

Sintiendo la armonía del entorno.

Se ha reflejado en mi cara la luz,

Se han separado mis labios con facilidad,

Y mis ojos han tomado prestado

Un color especial.

He visto el saludo de una flor al día,

El juego de un ave con el viento,

Besarse la tierra con el cielo

Y el adiós del sol en el mar.

He observado pequeños detalles

Y he disfrutado de su calidad.

¡La vida sucede, sin más!

bottom of page